MIENTRAS NIEVA SOBRE LOS CEDROS

Saltan y trepan tus ausencias
Mientras yo te busco desolado.
Recuerdo nuestro amor adolescente
Cuando tenía dos brazos
Y tu corazón.

Ahora sólo soy un periodista manco,
El último romántico,
Que para demostrar mi amor,
Mi eterno amor por ti,
Va a decir te amo.

Y cómo, y cuánto,
Salvando a tu esposo del cadalso,
Del racismo obsceno de este pueblo,
El mismo que me apartó de ti
Y de tu amor.

Mi brazo cayó en la guerra,
Mi alma mucho antes
Cuando dijiste adiós
Mientras nieva sobre los cedros,
Mi eterno otro yo.

Saltan y trepan tus ausencia
En esta sala de vistas de Washington.
Trepan y saltan aunque estés presente,
Porque no estás por mí
Y yo sí por ti, mi naciente sol.