Morir cien veces por ti
Es mucho mejor
Que una sola por nada.
Sufrir esta quemazón desesperada
Es increíblemente mejor
Que la tibieza de esta nada.
Sajar mi alma en jirones
Es inmensamente mejor
Que creer en dioses de nada.
Sollozar mil lágrimas diarias
Es todavía mejor
Que no sentir absolutamente nada.
Decir adiós sólo con palabras
Es lo mejor
Porque con los ojos me gritas no te vayas.